Una parte de turismo, una de rescate patrimonial, mucho de fotografía autoral, paciencia, gestión cultural y más paciencia son los ingredientes que conforman este proyecto que busca difundir a través de plataformas visuales, la gran maravilla que nos ofrece el paisaje de nuestro norte. Ckuri puede traducirse como Viento de Gran Espíritu y busca conectarnos con herencias ancestrales en un lenguaje que está al alcance de todos. Edgardo Solís es el director de esta iniciativa y nos dice que recién comienza ¡Jallalla!
Por Pamela Rodríguez / Claudia Zazzali. Fotografías Rodrigo Herrera y archivo Edgardo Solís.
“Mucho antes de la llegada del imperio inca, los seres humanos buscaban demarcar su lugar en el mundo, mediante complejos rituales, en espacios definidos para separar lo sagrado y lo profano. Así cerros, concavidades, montañas y múltiples elementos topográficos van adquiriendo un alto valor simbólico vinculando el paisaje con la experiencia emocional de quienes lo habitan”. ¿Dónde están estos terrenos? ¿Qué queda de ellos hoy en día? Edgardo Solís convocó a Angélica Araya, Álvaro Rojas y Juan Pablo Loo para que fueran parte de Ckuri, un proyecto esencialmente visual, que convenció a este grupo de profesionales a emprender un viaje entre montañas para mostrar al mundo estas
tradiciones andinas.